Espero que al igual que yo, otros muchos que aman nuestra profesión, y orgullosos de la bombeta artillera que portan en la solapa, luchen para que se le de una utilidad digna, a nuestra Real Fábrica de Artillería sevillana, y no ocurra con ella, lo mismo que con nuestro Regimiento de Artillería de Campaña nº 14.