JUSTIFICACIÓN: La llave simboliza que la Artillería de Costa, representada por los tubos de cañón, tiene la facultad de cerrar el Estrecho de Gibraltar.
Aprobado en Acta nº 32 por la Ponencia de Uniformidad el 5 de noviembre de 1987.
El escudo está tomado de http://www.andalucíaimagen.com/
ESCUDO DEL MACTAE DEL UNIFORME DE FAENA
UNIDAD DE TRANSMISIONES DEL MACTAE
ZONA DE CONTROL DEL MACTAE
DIAPARO DE UNA PIEZA DE ARTILLERIA DE COSTA
PERTENECIENTE AL MACTAE
¿QUÉ FUE, DE LA ARTILLERIA DE COSTA DEL ESTRECHO?
La misión encomendada a esta ilustre y veterana Unidad de nuestras Fuerzas Armadas, ha sido cumplida durante décadas, con una ejemplar eficacia, asumiendo orgullosos sus miembros, el objetivo asignado, no solo como Defensa Nacional, sino Europea, dentro del Plan Estratégico Conjunto.
Los nuevos misiles de largo alcance, y sofisticados radares, desplazaron en un principio a un segundo plano, a los enormes pero operativos cañones costeros, anclados en casamatas. Estos siguieron trabajando en silencio, realizando su encomiable y abnegada labor, luchando contra los avances tecnológicos, aceptando sus escasas limitaciones, pero sin descuidar, el control sobre el tráfico marítimo, y aéreo de la zona.
Lo lamentable, es que por caprichosa decisión del Ministerio de Defensa, un buen día de finales del 2008, se ordenó el desmantelamiento de casi toda la Artillería de Costa desplegada sobre las dos orillas del Estrecho, así como de su mando (MACTAE), la misma que vigilaba, e identificaba la nacionalidad de todo buque de guerra, portaaviones, o submarino, que pretendiera cruzar el paso “Atlántico-Mediterráneo” o viceversa, y la misma que desde tiempo inmemorial, había disuadido de intervenir a “conocidas potencias” de dudosa intenciones. Desde ese momento se cedió voluntariamente, el dominio y autoridad sobre el valioso enclave, a Gran Bretaña y Francia, para beneficio de Marruecos, y ante la mirada atónita de la OTAN.
Aquellos cañones de inmenso calibre, que un día formaron parte de la historia de la Defensa de nuestra España, no merecen dormir en el olvido de un desguace o chatarrería particular, ante el incomprensible mutismo y pasividad, de gran parte de la cúpula militar.
¡Que nadie se eche las manos a la cabeza, cuando se anuncie la próxima “marcha verde”! ¡Ésta, con toda seguridad, no será sobre el Sahara!
No es ético jugar con la seguridad de un país, escondiendo las vergüenzas y miserias, bajo la alfombra de la crisis.
Antonio Lozano Herrera
Subteniente de Artillería.