jueves, 11 de abril de 2013
José Alfageme
Varias Fotografías de nuestro entrañable amigo artillero José Alfageme
de su paso por nuestro RACA 14 a comienzos de los años 80.
Julian Palencia, Manel Ontalvilla, Mata, Fernando Burgos, J M Alfageme y Naranjito.
A la espera de que me envíe más datos sobre las mismas, como lugar, compañeros, y alguna anécdota para ampliar el comentario.
ISRAEL FERNÁNDEZ MARTÍN 94/4
CABINAS DE TELÉFONO JUNTO A CUERPO DE GUARDIA (Año 1994)
Israel Fernandez “El Martin” y J. M. Nieto Barea “El loco”. Ambos del 4/94
Antiguo sargento Pascual Gª Rivera.
El antiguo Sargento Pascual García Rivera (primero izquierda),
nos envía esta fotografía con los integrantes de la 6ª Batería del IIº Grupo del RACA 14.
Piensa que por la uniformidad se trata del año 1989 aprox.
Pedro Herrero Planells (PL.M. IIº Grupo) año 84
Pedro Herrero Planells, nos envía esta fotografía de la PL.M. del IIº Grupo
a finales del 84, con algunos mandos en ella.
Fotografías enviadas por José Domínguez Campos 84/6º (7ª y 4ª Bías)
José Dominguez Campos, durante unas maniobras de la 7ª Batería
en Obejo (Córdoba) año 1984
En los hangares del IIº Grupo, el Escalón de los vehículos estaba al fondo,y la temida garita 4 con la historia de la madre del artillero que murió en ella ,y cuando el centinela se quedaba dormido,aparecía el espíritu de la madre para darle café al centinela. ¡Leyendas cuarteleras!
Aquí se encontraban las piezas del 203/25 de la 7ª Batería,
cuando todavía el IIº Grupo del Regimiento era ATP.
Hangar de la 7ª Bateria, con mis colegas de la S.V. Borrego y Muñiz.
Primeras maniobras que realizó cuando llegó al Regimiento,
pertenecía a la piezas del SGTO. PRIMERO TOMAS NAVARRO AGUIRRE.
Artillero Amador González Villanueva
Amador González Villanueva, nos envía esta simpática fotografía en la que aparece junto a sus compañeros: Antonio Martínez Díaz, Jesús García Andúgar, y Luis Fernando Salazar Eguiluz.
Maniobras Cerro Muriano 79.
Amador González (con bigote), acompañado por Julián Olmo Sepúlveda. año 1979.
Junto a uno de los monumentos, cuyo texto sacado de un soneto de El Quijote decía así:
Primero que el valor faltó la vida
en los cansados brazos, que, muriendo,
con ser vencidos, llevan la vitoria;
y esta vuestra mortal, triste caída
entre el muro y el hierro, os va adquiriendo
fama que el mundo os da, y el cielo gloria.
en los cansados brazos, que, muriendo,
con ser vencidos, llevan la vitoria;
y esta vuestra mortal, triste caída
entre el muro y el hierro, os va adquiriendo
fama que el mundo os da, y el cielo gloria.
martes, 12 de febrero de 2013
A UN GRAN AMIGO Y COMPAÑERO: JAVIER ROMERO PEÑA
Hace tiempo que deseaba dar realce a este modesto blog artillero con fotografías de una persona de las que han dejado huella en mi vida profesional y aun hoy después de tres décadas y media de aquel verano que nos conocimos (1979) forma parte importante en mi vida. No nos vemos con la asiduidad que me gustaría, pero el solo conocimiento de que lee mis textos, de que se preocupa por mi en la distancia, de que gracias a las nuevas tecnologías y redes sociales permanecemos en contacto, me proporciona la tranquilidad de aquel que sabe que siempre contará con su impagable amistad. Si hay alguien que aun me sigue haciendo reír cada vez que me cuenta alguna de las muchas anécdotas que hemos vivido juntos, ese eres tu ¡Javier!. ¡Cuantas maniobras, prácticas, instrucción, teóricas, y ratos de ocio hemos compartido! habría para escribir un enorme libro! con permiso del censor. Tu y yo sabemos a quien nos referimos, ja ja.
Tú, has sido siempre para mi, ese compañero con quien compartir trabajo, ese maestro de quien aprender por tu experiencia, y ese amigo que siempre ha estado conmigo en los buenos, pero también en los malos ratos.
Me ha costado trabajo conseguir tu consentimiento para la publicación de estas fotos, porque si en algo has destacado siempre ha sido por su trabajo anónimo, por su ausencia de protagonismo a pesar de su encomiable labor en nuestras Fuerzas Armadas, en nuestra Artillería y en nuestro recordado RACA 14.
Esta fotografía es de 1975, cuando el Grupo era remolcado. En ella se ve a Javier Romero Peña, espoletando un proyectil. Con la atenta mirada del gran maestro armero nuestro amigo Antonio Sosa Benítez. ¡Vaya pareja!
Tú, has sido siempre para mi, ese compañero con quien compartir trabajo, ese maestro de quien aprender por tu experiencia, y ese amigo que siempre ha estado conmigo en los buenos, pero también en los malos ratos.
Me ha costado trabajo conseguir tu consentimiento para la publicación de estas fotos, porque si en algo has destacado siempre ha sido por su trabajo anónimo, por su ausencia de protagonismo a pesar de su encomiable labor en nuestras Fuerzas Armadas, en nuestra Artillería y en nuestro recordado RACA 14.
En esta foto aparece Javier Romero Peña a la derecha de la imagen y corresponde a 1978 o 79. ¡Vaya pedazo de escoltas de Estandarte! A la izquierda Antonio Naranjo (q.e.p.d.) y en el centro Navarro González.,¡que buenos años!.
Esta fotografía es de 1975, cuando el Grupo era remolcado. En ella se ve a Javier Romero Peña, espoletando un proyectil. Con la atenta mirada del gran maestro armero nuestro amigo Antonio Sosa Benítez. ¡Vaya pareja!
Un momento para el humor. En esta fotografía aparece con su casco adornado de flores por el conductor de la pieza, durante un ejercicio con nuestras "niñas" las M-44. Asegura que solo se lo colocó para la fotografía, el sabía separar los momentos de ocio y los del trabajo y concentración. Virtud que siempre le ha acompañado. Era un gran amigo para su tropa y un excelente mando. Sabía distinguir perfectamente cuando se podía bromear y cuando había que ponerse serio, porque las circunstancias lo requerían.
Esta foto es de 1976 aproximadamente. Le gustaba concertar partidos de fútbol sobre todo con Mairena del Alcor (su ,mi pueblo). Es
el campo de fútbol del Mairena de aquella época. Los futbolistas eran de la 5ª batería reforzada con algún que otro de otra
unidad. Se desplazaban en dos o tres coches, y a veces hasta en autobús. ¡Siempre fuiste y eres un gran aficionado al fútbol!
Junto a Javier podemos ver con barba al sargento Barbosa.
Año 1988, el General Esquivias Franco concediéndole una condecoración. ¡de sobra merecida!
Fotografía de su despedida del Rgto. y de su actividad profesional,
cuando pasó a la Reserva Transitoria en Junio de 1995.
Esta fotografía corresponde a la celebración de las bodas de plata de su promoción en 1998.
¡Que buenos recuerdos me trae ese bello patio de la Academia de Artillería segoviana!.
¡GRACIAS AMIGO JAVIER!, por tu importante colaboración en nuestro blog artillero.
sábado, 2 de febrero de 2013
Fotografía con solera e historia. Grandes amigos artilleros de aquel RACA 14 que nos arrebataron. Algunos nos dejaron un lejano día, y los demás se encuentran en la actualidad en situación de reserva o retirados, después de una larga trayectoria profesional dedicada a la milicia.
No pongo nombres, me gustaría que fueseis los seguidores de este blog artillero, los que recordarais con nostalgia y cariño, a aquellos que un día fueron vuestros superiores jerárquicos y compañeros.
viernes, 11 de enero de 2013
A LA MEMORIA DE MI AMIGO Y MAESTRO DIEGO SERRANO JIMÉNEZ
Parece que fue ayer cuando en agosto de 1979 hice mi presentación en el Regimiento de Artillería de Campaña nº 14 de Sevilla. Ya han pasado más de treinta y tres años y recuerdo como el primer día, aquellos veteranos sargentos que nos recibieron. Para mi eran todo un ejemplo a seguir, y de ellos aprendimos con ellos, que el Cuartel no era la Academia, que habíamos entrado en un mundo diferente, un lugar donde tendríamos que llevar a la practica con hombres verdaderos artilleros que cumplían su Servicio Militar, lo aprendido en los libros durante tres largos años. Nos hicieron comprender que el trato humano, la educación, los consejos personales, el saber escuchar los problemas de aquellos hombres que nos llegaban "por obligación" para servir a la Patria, era más importante que toda la teoría memorizada en las aulas de formación castrense. Ellos nos enseñaron que antes que el cañón estaba el artillero. De nada servía saber calcular coordenadas, derivas y ángulos de tiro, si no conocíamos a nuestros soldados.
Podía llenar varias páginas con sus nombre, como Fco. Javier Romero Peña Fco. Caballero Cazorla, Fco. Fernández Martín, Pepe Espina Moreno, Antonio Arenas, Paco Rdguez, Francés, Tomás Navarro Aguirre, Antonio Beltrán, Diego Díaz, Miguel Mellado Moreno, Manuel Lesmes Hinojosa, Francisco Sandoval Rdguez, Enrique Belderrain Díaz, Francisco Lavado Galvarro, y entre ellos, mi entrañable y tristemente fallecido Diego Serrano Jiménez, un extremeño con medio corazón andaluz. Un equipo de profesionales de los que después de tanto tiempo me siento orgulloso de compartir amistad, y de los que tanto aprendí.
Ayer día nueve recibí una fatal noticia, mi amigo Diego Serrano había fallecido. Las noticias aunque esperadas no dejan de ser dolorosas, y aunque todos sabíamos que el final estaba cerca, nos resistíamos a creerlo. No era posible que Diego, Dieguito para los colegas nos dijera adiós cuando hace tan solo unos meses se encontraba repleto de vitalidad y ganas de vivir. Una enfermedad incurable le hizo en poco espacio de tiempo verse en un estado lamentable y terminal. Ni los mismos médicos daban crédito a la lucha incansable por sobrevivir de nuestro compañero. Solo lo achacaban a una gran fortaleza física. ¡Como se ve que no te había conocido Tigre! ¡Nadie sabe mejor que los que te hemos tratado, tu especial carácter. Nunca te diste por vencido, ni en el trabajo ni en la enfermedad.
Cuando me enteré de la gravedad de tu dolencia, acudí al hospital para visitarte. Eso fue pocos días antes de estas Navidades. Te puedo asegurar que aquel que encontré postrado y conectado a cables y tubos no era mi amigo Diego. Aquel al que tomé la mano y acaricié durante una hora, mientras te decía al oído aquí está tu amigo Antonio Lozano. El que me miraba sin verme mientras convulsionabas sin control no era Dieguito, no era el hombretón de ruda voz y campechano que yo conocía. Y me tuve que tragar las lágrimas, ante la incertidumbre de no saber si me veías, si me sentías, si me escuchabas.
Hoy te he vuelto a ver, esta vez para despedirme de ti. He intentado recordar todas las anécdotas vividas en nuestros años de servicio, y me costaba creer que aquel cuerpo inerte que tenía frente a mi fueses tu.
Por eso intento borrar esas imágenes de mi mente y quedarme con la última vez que te vi sonriendo, tal y como tu eras. Fue hace dos años y medio, en agosto del 2010, cuando nos reunimos con nuestros artilleros del RACA 14 y GAAAL II, llegados de todos los rincones de España, para pasar un fin de semana en Sevilla. En aquel encuentro aunque solo fuera por unas horas y mientras almorzábamos, comprobé que seguías manteniendo esa simpatía y seguridad que siempre te han acompañado.
Ayer te fuiste, pero siempre permanecerás en nuestras mentes, porque has sido parte importante en nuestras vidas. Por eso no solo te recordarán los anteriormente mencionados compañeros de promoción, también contarás con el recuerdo de aquellos Artilleros a los que no dejaste solos en su visita a nuestra ciudad. Aquellos que te hicieron recordar infinidad de momentos vividos, hace más de treinta años. Aquellos que estuvieron a tus órdenes y se sienten orgullosos de haberte tenido como jefe. Muchos han sido los que me han llamado lamentando tu marcha, y muchos también los que no han podido reprimir las lágrimas al conocer la triste noticia.
Hoy son muchos los que lloran tu ausencia, como nuestro Furriel Manuel Ramos Iranzo, o Agustín Grimaldos Sevilla, Melchor de la Viña Segura, Emilio Barroso, Antonio Parrado, Braulio Santiago, Carlos Pérez García, Eduardo Moreno Odones, Enrique Álvarez, Fernando Herrero, Jacinto Medina, Jesús Narváez, Jesús Palacios, José Manuel González Maqueda, José María Hiraldo Naranjo, José María Poleo, José Miguel Alfageme, Juan Manuel Hontavilla, Juan Palencia, Julio Martín Almarcha, Ricardo Carpio, Ricardo Egea, Vicente Molina, todos tus queridos artilleros que te acompañaron ese importante día. Todos ellos orgullosos de haber servido en el Acuartelamiento Daoiz y Velarde.
Te has ido, pero la huella dejada será imborrable, amigo DIEGO SERRANO JIMÉNEZ.
¡Descansa en paz compañero!
DIEGO SERRANO JIMÉNEZ
APERITIVO ANTES DEL ALMUERZO
TODOS TUS AMIGOS ARTILLEROS QUE SIEMPRE TE RECORDARÁN