A todos los artilleros de España

AL LLEGAR AL FINAL DE CADA PÁGINA, PICHA EN "Entradas antíguas", Y SEGUIRAS DISFRUTANDO, DE AQUELLOS LEJANOS RECUERDOS, QUE AUN HOY TE EMOCIONAN. ¡GRACIAS!

Bienvenidos al blog del antiguo Sargento Lozano. Aquel que ingresó en el Ejército, un 15 de abril del 75, voluntario en la Base de Parque y Talleres de Automovilismo de Córdoba, que ascendió a Cabo en dicha Unidad y Especialidad, y a Cabo 1º de Artillería a finales de ese mismo año, siendo destinado al C.I.R 4 de Obejo, hasta su ingreso en la Academia de Suboficiales en septiembre del 76. El mismo, que tres años después, un 6 de agosto del 79, hizo su presentación en el Regimiento de Artillería de Campaña nº14 (porque decían, que era lo más parecido a la Legión), con sus dorados galones de Sargento, junto a otros queridos compañeros de la III Promoción de la A.G.B. de Suboficiales. El que se fue haciendo hombre, y adquiriendo experiencia gracias a su tropa, de la que ha aprendido a lo largo de los 31 años de servicio, mucho de lo que hoy presume de saber.

En un momento de nostalgia, buscando en mi pequeña biblioteca particular, ese querido baúl de los recuerdos, donde tengo a mano, los libros más importantes de mi vida, tomé aquel que con motivo de la festividad de Santa Bárbara de 1981, me regaló la 5ª Batería del IIº Grupo del RACA 14, y dedicado por el Capitán de la misma D. José Luis Palomar Millán.

Su título: SEVILLA Y LA ARTILLERIA, escrito por el entonces coronel D. Enrique de la Vega Viguera. Y me dije: ¡que mejor nombre para este blog, que el de una de las obras más emblemáticas de la literatura militar y sevillana a la vez!.

También guardo como un pequeño tesoro, ese otro libro, escrito por el mismo autor en 1992, titulado "El Regimiento de Artillería de Sevilla" (EL CATORCE). Por ello, el nombre de este blog, es un pequeño homenaje, al tristemente desaparecido Coronel De la Vega, así como a todos los oficiales, suboficiales, pero sobretodo a la tropa, de nuestra artillería, y también ¡como no! a la ciudad de Sevilla, sin olvidar mi querida Córdoba natal.

La finalidad de este blog, es lograr un lugar de encuentro, para todos aquellas personas que hayan tenido un vínculo con la Artillería española, y más concretamente sevillana y cordobesa, a través de los tiempos. Pero también para todos aquellos, que sin ser ni haber sido artilleros, se sientan unidos sentimentalmente a nuestras Fuerzas Armadas.

Aquí tiene sitio, todo aquel que desee contar sus experiencias “cuarteleras”, durante aquella “mili”, que tanto maldecía en su juventud, y que con el paso de los años, comienza a traerles añorados recuerdos.

También tienen cita, todos aquellos que encontraron en el Servicio Militar a buenos amigos, y que desde el día que recibieron “la blanca”, no han vuelto a encontrarse.

No importa el lugar donde te encuentres, lo importante es localizar a ese compañero de fatiga y juerga, del que un día te despediste, sin darle importancia, y ahora después de muchos años, recuerdas los buenos momentos vividos, entre aquellos muros que formaban nuestro Acuartelamiento.

Todos sois bien recibidos, podéis contar anécdotas de los servicios de entonces, de maniobras, y porqué no, con el respeto que siempre caracteriza a un buen artillero, de los mandos con los que compartisteis aquellos inolvidables meses.

Tengo la esperanza, de que no solo la tropa colabore, y de que algún suboficial u oficial se anime también, a dejar su sello en este blog.

Mi intención es centrarme en la Artillería de Sevilla, y más concretamente en el histórico Regimiento de Artillería de Campaña nº 14 ("La legión chica"), como muchos de vosotros la denominábais, y El GAAAL 2, (Unidades que en tiempo ocuparon los terrenos del Acuartelamiento Daoiz y Velarde).

Pero sería injusto olvidar a mi II Grupo del Regimiento de Artillería Antiaérea nº 74 (El Copero), que desde la disolución del mencionado y mítico RACA 14, ha tomado el relevo artillero en la ciudad, y quisiera dedicarle su merecido espacio, ya que fue testigo de mi despedida, y de mi adiós a numerosos amigos.

También quisiera invitar a colaborar, a todos aquellos componentes de la Agrupación Táctica CORDOBA, con la que compartí siete inolvidables meses allá por 1994 en tierras Balcánicas, y en particular al Grupo de Artillería de Campaña ATP X con sede en Cerro Muriano, herederos del ilustre RACA 42, donde realicé el curso de cabo 1º, y aprendí mis primeros conceptos sobre la Artillería, y que tanto supuso en mi vida profesional y personal. Espero con ilusión vuestros valiosos comentarios. Animo desde este blog, a todo aquel apasionado de la Artillería o del Ejército en general, visite la página web de la Brigada Mecanizada Guzmán el Bueno X, (no tiene desperdicio). ¡Enhorabuena! http://www.ejercito.mde.es/organizacion/brimzx/gaca_x/inicio.htm
Todos estáis invitados a participar, es más, espero con ilusión recibir en mi correo, todas aquellas fotografías o videos relacionados con armamento, personal, acuartelamientos, maniobras, así como comentarios, recuerdos y anécdotas que marcaron vuestra vida (supongo que para bien), aunque reconozco que de todo habrá.

Un saludo para todos aquellos, que en su corazón albergan aún encendida, y a pesar del paso inexorable del tiempo, la llama de la dorada bombeta artillera. Y como dice nuestro himno: "Marchemos siempre unidos".

Para algunos seré su antiguo Sargento y Sargento Primero de la década de los ochenta, para otros su Brigada de los noventa, y para aquellos que compartieron conmigo los últimos siete años de servicio hasta el 2006, seré su Subteniente, pero que no le quepa duda a ninguno, que para todos seré Antonio Lozano, su amigo.

Un abrazo para todos.

Nuestra Patrona Santa Bárbara.

Nuestra Patrona Santa Bárbara.
"Y si un día Patrona te hicimos del valiente Artillero Español, fue al pensar en tu gloria que brilla, más radiante y más pura que el sol". Pinchando en la foto, podreis ver un video de la última celebración de nuestra Patrona en el RACA 14

¡ Nuestros héroes !

¡ Nuestros héroes !

Nuestro Escudo

Nuestro Escudo

¡ Y NUESTROS ESTANDARTES DEL REGIMIENTO !

¡ Y NUESTROS ESTANDARTES DEL REGIMIENTO !

Fachada principal del RACA 14

Fachada principal del RACA 14
ATP M-109

ENTRADA AL ACUARTELAMIENTO

ENTRADA AL ACUARTELAMIENTO
En un principio el suelo era de adoquines, y el Sargento Lozano con un reducido pelotón de artilleros, trajeron en varios camiones, procedente de la desaparecida Frábrica de Artillería, las planchas metálicas que le dieron mayor belleza a la entrada. Por el se accedía al Cuerpo de Guardia, Sala de Estandartes, Oficinas de la PL.M.M., Sala de visitas, y al Patio de Armas. ¿Donde estarán en la actualidad, los bancos y rejas forjadas, las elegantes lámparas, las impresionantes vidrieras, los originales azulejos? ¡Que pena! Según me apunta mi antiguo comandante Barón, las chapas metálicas que tomé de la Fábrica de Artillería para el túnel de la entrada, fueron tramitadas su regalo al Regimiento por el TCOL. de la misma, ante el Director de la Fábrica, don Alfonso Barón y Rojas-Marcos, dado, su afección a todo lo que oliera al 14.

Vista aérea del RACA 14

Vista aérea del RACA 14

ESTANDARTES DEL REGIMIENTO

ESTANDARTES DEL REGIMIENTO

NUESTROS ULTIMOS CORONELES JEFES DEL REGIMIENTO

NUESTROS ULTIMOS CORONELES JEFES DEL REGIMIENTO


"A MI QUERIDO AMIGO CHIRLACHI"

Ayer, a la caída de la tarde y acompañado por su fiel e inseparable “Luna”, saludé a mi amigo Chirlachi (el apodo, se lo colocaron en la Academia Militar allá por el 77).
Caminaba cabizbajo, sus ojos húmedos, delataban una profunda amargura y desolación. Necesitaba desahogarse, y me comentó que estaba hundido, desde que unos médicos con bata blanca y doradas estrellas en el pecho, decidieron que por su estado de salud, no era recomendable que siguiera en activo.
¡Que sabrán esos matasanos!, murmuraba por lo bajo.
Ya le noté algo cambiado, a su regreso de Los Balcanes allá por el 94. Hablaba de honor, de dignidad, de amor al servicio, de compañerismo, términos obsoletos en estos tiempos, y comenzó a sentirse incomprendido.
Así llegó un mal día, y una mezcla de tristeza, confusión, y nostalgia se apoderaron de él. Me dijo que le negaron cursos de perfeccionamiento, porque afirmaban que su sitio no estaba en el campo con la tropa, que a su edad era “carne de oficina”. Después de esto, ya nunca fue el mismo, no levantó cabeza.
Se sintió ignorado y abandonado por sus superiores, lo dijo públicamente, y eso le costó un adiós sin despedida. Tras una vida plenamente dedicada a la milicia, en el 2006 colgó el hábito mimetizado.
Cuando se marchó, las lágrimas le traicionaron, pero como solía inculcar a sus artilleros, lo hizo “con la cabeza alta, sacando pecho, y la conciencia muy tranquila”.
Dice que anda perdido, que no logra encontrarse. Las noches de vigilia son eternas, en ellas sueña despierto, con agotadoras marchas, con amenas teóricas, con brillantes desfiles.
Cada mañana, como un sonámbulo mira las bombetas doradas de su uniforme de gala, acaricia con mimo sus medallas, le da brillo a su viejo sable, y sobretodo recuerda....guardias, maniobras, y a sus queridos soldados, solo le queda eso....¡31 años, de recuerdos!.
Llora a escondidas, y sufre en silencio. Con su espinita clavada, aparenta ser feliz, solo por su familia. Se siente confuso, utilizado, y olvidado.
Desde entonces, para mitigar su ansiedad, para levantar su ánimo, para sentirse útil, se dedica a escribir “Cartas al Director” en algunos Diarios. ¡Suerte amigo Chirlachi!


Carta al compañero desconocido
Antonio Lozano Herrera


El Brigada Rafael (Libro "EL CATORCE")

El Brigada Rafael (Libro "EL CATORCE")
Jefe de la Banda de Trompetas del Regimiento

El Maestro Rafael

El Maestro Rafael

EN MEMORIA DEL BRIGADA RAFAEL MACIAS

El Brigada D. Rafael Macías Borras, logró tener a sus órdenes una de las mejores Bandas de Trompetas de nuestro Ejército. Nacido en el sevillano barrio de San Bernardo, ingresó en el Regimiento Montado de Artillería en 1901 con catorce años de edad. Actuaba en numerosos actos oficiales, siendo el principal la Semana Santa, destacando entre sus toques “Retreta y Polca”.
En la Semana Santa de 1929 que coincidía con la inauguración de la Exposición Iberoamericana, llegaron a Sevilla los Reyes, y con ellos la Banda del Regimiento de Húsares de la Princesa. Estos, acompañaban en el desfile procesional a la Hermandad de Las Cigarreras, mientras que la Banda del Tercero Ligero, dirigida por el Brigada Rafael, encabezaba la Cofradía de Montesión. Ambas Bandas se cruzaron en La Campana, donde acababa de actuar la de Madrid. Rafael, con la elegancia que le caracterizaba, se apoyó sobre los estribos de la montura de su caballo, giró su cuerpo hacia atrás, levantó el brazo izquierdo con su clarín bien visible, e inició la marcha de “Los Campanilleros”.
El público entusiasmado aclamaba y aplaudía al Maestro, y la Banda de los Húsares se tuvo que rendir, ante la grandiosidad de los toques de la Banda de nuestro Regimiento. En reconocimiento, el Rey Alfonso XIII, regaló al Brigada, un clarín con su firma y la boquilla de oro.
El gran esfuerzo, y pundonor que ponía en cada actuación, desgarrándose la garganta en cada toque, le hizo caer enfermo de una grave dolencia pulmonar, que le obligó a pasar a retiro en 1931.
Se comenta, que en la Semana Santa de dicho año, no pudo desfilar con la banda, y que el dolor le embargaba al verla por las calles sevillanas, sin el entusiasmo popular de costumbre. Por ello, enfermo, solicitó permiso al Coronel de la Unidad, para que le permitiera mandar aquel día su Banda. Se le autorizó, y el resultado fue apoteósico, volviendo a ser la de siempre. Por eso, D. Rafael Macías tendrá siempre un lugar privilegiado en la historia del Tercero Ligero, antigua denominación del RACA 14.


Clarín del Brigada Rafael, donada por su familia al Regimiento

Clarín del Brigada Rafael, donada por su familia al Regimiento
Obsequio del Rey Alfonso XIII y del Ayuntamiento de Sevilla en 1929

Antiguo Monumento a los Caidos en el RACA 14

Antiguo Monumento a los Caidos en el RACA 14
Inaugurado por el Coronel Esquivias en 1973 (Libro "EL CATORCE")

Ultimo Monumento a los Caidos del RACA 14

Ultimo Monumento a los Caidos del RACA 14
Inaugurado en 1989 con motivo del 50 aniversario del Regimiento con la actual denominación. (Libro "EL CATORCE")

Reyes Magos en RACA 14

Reyes Magos en RACA 14
Capitanes Santos Buendía, Silva Palma, y el Sargento Primero Lozano Herrera (¡por un día en la vida, no me tocó hacer de negro!)

Los Reyes de España presidiendo las Bodas de Oro del RACA 14 (05-03-1990)

Los Reyes de España presidiendo las Bodas de Oro del RACA 14 (05-03-1990)
Mandaba el Regimiento el Coronel D. Virgilio Lagares Caminero, y la formación estuvo al mando del Tcol. D. Salvador Santos Imbroda

Los Reyes firmando en el Libro de Honor del Regimiento

Los Reyes firmando en el Libro de Honor del Regimiento
Fotos tomadas del libro EL CATORCE

Coro de la Hermandad del Rocío de Sevilla

Coro de la Hermandad del Rocío de Sevilla
Esta fotografía del Coro de la Hermandad del Rocío de Sevilla, data del 5 de marzo de 1990, día en el que SS.MM. Los Reyes de España, nos honraron con su presencia, presidiendo el 50 aniversario del RACA 14. También actuaron con nuestro Coro de Artilleros, al mando de nuestro querido Pater Don Constancio, y del por entonces Teniente Ángel Cano Martín. Esta información, me ha facilitado el mencionado oficial, como también me ha dicho, que el Coro no solo actuó ese día; también lo hizo en Capitanía, Ceuta y Granada, con la música de la DIMZ, 2 (Soria 9), al mando del Cap. Abel Moreno. Ángel Cano, me envía un fuerte abrazo para aquellos oficiales, suboficiales, cabos 1º, y su querida tropa, de quienes asegura aprendió mucho.
Gracias amigo Ángel, siempre a tus órdenes.

Jura de Bandera, en el Patio de Armas del Acuartelamiento

Jura de Bandera, en el Patio de Armas del Acuartelamiento
Mis siempre amigos Capitán Palomar junto al Pater y los entonces sargentos, Pascual, Raposo, y Contreras

¡Aquellas Juras de Bandera!

¡Aquellas Juras de Bandera!
Padres y novias dando calor a los nuevos artilleros

Comedor del Acuartelamiento

Comedor del Acuartelamiento
Libro "EL CATORCE"

El antiguo Picadero, convertido en Gimnasio del Acuartemlamiento.

El antiguo Picadero, convertido en Gimnasio del Acuartemlamiento.
LIBRO "EL CATORCE"

El famoso "Corral de la Pacheca" del RACA 14

El famoso "Corral de la Pacheca" del RACA 14
¡Cuantas tertulias cuarteleras esconden sus paredes!

RACA 14 PATRIMONIO DE SEVILLA

El 31 de diciembre del 95, el Ministerio de Defensa, con el “ordeno y mando” que caracteriza a nuestro colectivo, creyó oportuno el cierre del mítico y legendario Acuartelamiento Daoiz y Velarde. Según él, la modernización del Ejército, así lo exigía. Hoy doce años después, y pese a haber sido parte importante de la historia de la ciudad de Sevilla, permanece en un lamentable e inconcebible estado de abandono. Desde aquel primer día, en que sus inmensos portones echaron el cerrojazo, quedó al alcance de vándalos, chorizos, y okupas, que avasallaron con todo cuanto de valor permanecía en su interior, bancos forjados, artísticas rejas, maderas nobles, antiquísimos paños de azulejos sevillanos, bellos mosaicos de vidrio, y un largo etc. difícil y doloroso de calcular.Puedo asegurar que era hermoso, tanto, que se comentaba que su fin sería adaptarlo a museo, archivo, escuela ecuestre, universidad u organismo oficial, respetando su emblemática fachada, sus calles empedradas, sus misteriosas garitas, sus enormes dormitorios y cocina, con intenso olor a rancho cuartelero, pero sobre todo aquel Patio de Armas, con aroma a naranjos.La realidad es que se muere, que agoniza, que dentro de poco, ya nada quedará de él, solo el recuerdo. Sus terrenos pasarán a albergar, acogedores y modernos apartamentos.Muchas guardias, desfiles, servicios, teóricas, anécdotas, y charlas “cantineras”, alrededor de las croquetas de Nieves y Paco, se esconden entre sus muros. Viernes de solemnes Actos a los Caídos, de eternas formaciones, de incontables firmes, descansos y a cubrirse, de un dos patata y arroz, y de vivas a España.¡Hay mi RACA 14!, Regimiento señero de la historia militar española ¡cómo te añoro!. Cuantos paseos con trinchas, a la luz de la luna, ¡alto quien va, santo y seña!, ¡retretas floreadas!, ¡imaginaria agua!, ¡Batería el Capitán!
El transcurrir inexorable del tiempo, los “cacos”, y la desidia de algunos mandos, han terminado contigo.
Sr. Ministro, cuando dé la orden a excavadoras, picos y palas, estas se pondrán a trabajar a la voz de “de frente paso ligero ¡ar!”, pero no le quepa duda, de que estará acabando con el valioso patrimonio de una “Muy Noble, Leal, Heroica, Invicta y Mariana, ciudad de Sevilla”.

Escrito por el Subteniente Antonio Lozano Herrera, y publicado en el ABC de Sevilla, el 18 de febrero de 2008.


Aeropuerto de San Pablo (Sevilla), 29-03-1994

Aeropuerto de San Pablo (Sevilla), 29-03-1994
Pinchando sobre la fotografía, podrás leer la carta publicada por el Diario "El País", el 24-05-2007

Foto publicada en el "Diario Córdoba" el 30 de marzo de 1994

Foto publicada en el "Diario Córdoba" el 30 de marzo de 1994
El Brigada Lozano partiendo para Bosnia

Patrullando por los alrededores de Mostar en un BMR.

Patrullando por los alrededores de Mostar en un BMR.
Intérprete Zelko Jelaska, Brigada Lozano y Capitán Gómez

Al fondo, el Puente Viejo de Mostar, verdadera joya arquitectónica, totalmente destruido.

Al fondo, el Puente Viejo de Mostar, verdadera joya arquitectónica, totalmente destruido.

Repartiendo regalos a mis niños bosnios

Repartiendo regalos a mis niños bosnios

Soldado Raquel Gallego, Capitán Daniel Ruiz, y Brigada Antonio Lozano, repartiendo misiones

Soldado Raquel Gallego, Capitán Daniel Ruiz, y Brigada Antonio Lozano, repartiendo misiones

Mi primera Guardia en el Destacamento de Medjugorje (Bosnia-Herzegovina)

Mi primera Guardia en el Destacamento de Medjugorje (Bosnia-Herzegovina)

Capitán Gómez y Brigada Lozano embarcados en el rio Neretva de Mostar

Capitán Gómez y Brigada Lozano embarcados en el rio Neretva de Mostar

El orgullo de tener un hijo artillero

El orgullo de tener un hijo artillero
Rafael Lozano Torrico

¡ Y verlo jurar Bandera !

¡ Y verlo jurar Bandera !
(12 de noviembre del 2000)

Su abuelo Rafael Torrico Beltrán, jurando Bandera el mismo día que su nieto

Su abuelo Rafael Torrico Beltrán, jurando Bandera el mismo día que su nieto
Camposoto, San Fernando (Cádiz). Noviembre 2000

A la memoria de mi padre ¡ Ese gran hombre y artillero !

A la memoria de mi padre ¡ Ese gran hombre y artillero !
José Lozano Márquez

MI HOMENAJE AL CABO LOZANO

En una guerra civil, cuando eres un chiquillo, rara vez te dan la oportunidad de elegir bando. En la mayoría de los casos, depende de la zona en que te sorprenda su inicio, para ser reclutado por rebeldes o leales, monárquicos o republicanos, fachas o rojos. Solo se trata, de una maldita lotería, a la que te obligan a jugar, con la seguridad de que siempre pierdes.
Por ello, ahora que está de actualidad la “Ley de la Memoria Histórica”, con su abanderado al frente, “el abuelo, capitán Lozano", quisiera, aun no siendo presidente, reivindicar mi personal memoria, cuyo protagonista se llamaba también Lozano. Pero este no era oficial, solo alcanzó el modesto empleo de cabo. Con diecisiete años, y sin saber de alzamientos, revoluciones, y cruzadas, se vio con un fusil al hombro, una mochila a la espalda, y un uniforme que nunca había elegido, simplemente fue “el premio o castigo” en ese mencionado y extraño sorteo. No portaba estrellas, unos simples galones rojos adornaban su pecho, distinción por saber leer y escribir. Comprobó con amargura, como en la trinchera opuesta, se encontraban familiares y amigos, sin entender con certeza porqué se disparaban. El cabo Lozano, no murió fusilado, la diosa fortuna así lo quiso.Una vez acabada la contienda fratricida, se casó, y trabajó sin descanso, para educar con dignidad a sus hijos. A estos, les legó un testamento, que no hablaba de vencedores y vencidos, de odios, venganzas, o recelos, muy al contrario, su mensaje siempre fue de tolerancia, respeto, y paz. ¡GRACIAS PAPÁ!

Mi hermano, "El Prenda de la Caleta" en 1968, vistiendo el uniforme de Cabo, allá en Cerro Muriano

Mi hermano, "El Prenda de la Caleta" en 1968, vistiendo el uniforme de Cabo, allá en Cerro Muriano
Pincha en la foto, y comprobarás la belleza de su arte.

Vista aérea del RAAA 74 (EL COPERO)

Vista aérea del RAAA 74          (EL COPERO)

Despacho del Coronel jefe del RAAA 74

Despacho del Coronel jefe del RAAA 74

PL.M.M. del RAAA 74

PL.M.M. del RAAA 74

Patio de Armas de EL COPERO y Munumento a los Caidos

Patio de Armas de EL COPERO y Munumento a los Caidos

Fachada de la USAC de EL COPERO

Fachada de la USAC de EL COPERO

Dormitorio de tropa femenino

Dormitorio de tropa femenino

Hogar del Soldado de El Copero

Hogar del Soldado de El Copero

Comedor de El Copero

Comedor de El Copero

Artilleros con uniforme de época.

Artilleros con uniforme de época.

¡Siempre te recordaremos!

¡Siempre te recordaremos!
Francisco Hidalgo Gil
A LA MEMORIA,
DE UN AMIGO Y COMPAÑERO
El miércoles 26 te dije adiós Paquito. La muerte, no ha querido esperar a la vejez para llevarte. Cuando todo te sonreía, cuando los amigos te admiraban por tu nobleza, y la juventud te acompañaba, en plena primavera de la vida, y en acto de servicio, la carretera, esa maldita y traicionera carretera, a la que tantas veces le habías plantado cara, ha decidido alejarte de nosotros.
No te fuiste acompañado de la soledad, sino de todo un pueblo lebrijano, que junto a tus amigos de Unidad (RAAA 74), se unieron para date el último adiós.
Te has marchado, como solo lo hacen los héroes, con la bandera de España cubriendo tu féretro, y las salvas de honor, disparada por tus compañeros, que a la vez que apretaban el gatillo con un nudo en la garganta, eran incapaces de controlar las lágrimas.
Estoy seguro que nos vistes, y te fuiste con la satisfacción, de haber dejado una huella imborrable, en el corazón de los que allí, llorábamos tu ausencia.
Erais una autentica piña, un equipo al que durante años, he tenido la suerte de pertenecer. A mi lado, se encuentra mi hijo, sí, tu querido amigo Rafael, que llora sin consuelo como un chiquillo, tu desdichada muerte. Paradojas de la vida, cuando se disponía a divertirse en la feria, cuando pensaba que quizás, podía encontrarse con su amigo Paquito Hidalgo en alguna caseta, para charlar y reíros, como hacíais a menudo, le llegó el golpe. Te puedo asegurar que está hundido, porque ha perdido a esa persona entrañable, con la que ha disfrutado, en numerosas maniobras, compartiendo trabajo, comida, y ocio. Además, de muchas horas, al volante del mismo camión.
Recuerdo esos días en Galicia, recogiendo chapapote, al igual que aquellas clases del curso de cabo, momentos que me sirvieron, para poder disfrutar de tu compañía. Tu sonrisa me acompañará siempre, esa que te caracterizaba, porque casi a todo sabias darle, su toque de humor, ¡bien sabias tu, que esta vida, solo es una broma! Aunque en ocasiones, una broma pesada. Agradezco tus llamadas y visitas, interesándote por mi salud, desbordaba humanidad como pocos. Guardaré siempre tu número en mi móvil, para llamarte al Cielo, cuando necesite una sonrisa. Y recuerda ese Himno que hemos cantado juntos, en infinitas ocasiones ¡LA MUERTE, NO ES EL FINAL!

Abril de 2006
Antonio Lozano Herrera
Subteniente de Artillería


FERNANDO CASTRO RONCERO

FERNANDO CASTRO RONCERO

Portada de uno de sus discos

Portada de uno de sus discos
Pincha en la foto, y escucharás uno de sus grandes éxitos
AL CANTAUTOR SEVILLANO FERNANDO CASTRO

Muchas han sido las ocasiones que me he preguntado ¡qué habrá sido de aquel bohemio y soñador!. ¡Éramos tantos, los que solo veíamos en ti, a un loco lunático, lleno de inalcanzables proyectos, pero con una sonrisa infantil, hasta en los momentos más difíciles!.
Yo sé, que en el fondo sufrías al verte incomprendido, porque eras diferente; tu soñabas despierto, mientras nosotros intentábamos vivir dormidos. Hablabas rápido, porque tus ideas, eran más veloces que tu voz. Mirabas con valentía e ilusión al futuro, sin resignarte a compartir la monotonía diaria. Vivías y disfrutabas nuestra profesión militar, con la savia que tu abuelo materno te inyectó en las venas.
Como buen artillero, siempre al pie del cañón, pero lo tuyo no era el ejército ¡aunque lo amabas!. Habías nacido para la música, y te marchaste a otra Unidad, para cambiar las ráfagas de fúsil, por el redoble de un tambor en la Banda de Música del antiguo “Soria 9”.
Con tu ausencia, muchos de los que te ignorábamos, y sonreíamos cuando dejabas volar la imaginación ¡y doy fe de que volaba alta!, nos dimos cuenta, del gran hueco humano que dejaste.
Coincidimos en algunos desfiles, todos marchábamos con la marcialidad que el ritmo de tu tambor nos marcaba. Nos saludábamos, y me comentabas con un brillo especial en los ojos, lo bonito que te iba la vida. Más tarde supe que tu talento ha dejado huella en bares y pubs de Sevilla, luchando por alcanzar aquellos sueños, que solo tu sabías que se cumplirían. ¡No seré yo, el que me suba al carro de los pitonisos, alegando que me lo imaginaba!. En ésta egoísta sociedad, donde a los soñadores se les denomina simples ilusos, son muy pocos los que consiguen tocar el cielo, antes de ser marcados con el maldito sello de la locura.
Te ha llegado el éxito y la fama, gracias a tu voz y a ese “pianito flamenco”, cuyas teclas acaricias con mimo. Por eso te felicito Fernando, con la certeza de que si en los futuros conciertos, te dejas acompañar por tu Virgen de la Paz, y tu madre África, la musa que te inspira desde donde bailan los gitanos, el triunfo no se te escapa.

Subteniente de Artillería
Antonio Lozano Herrera




Brigada Lozano donando sangre junto a su Sección

Brigada Lozano donando sangre junto a su Sección

GALICIA: OPERACION CHAPAPOTE

GALICIA: OPERACION CHAPAPOTE
Mi querida Sección "Quita Chapapote" Febrero del 2003

Alojados en un Polideportivo

Alojados en un Polideportivo
Aquellos grandes compañeros, de la Bia de Servicios del IIº Grupo del RAAA 74

Anécdota en las playas gallegas.

Anécdota en las playas gallegas.
El conductor de la máquina, que estaba durmiendo en la arena a pierna suelta, mientras nosotros trabajábamos duro, se indignó porque le manchamos su pala automática, al subirnos para hacernos la foto. No esperaba que le ofrecieramos cubo y pala, para que nos ayudara a coger chapapote, a cambio de limpierle el vehículo. Por supuesto, no aceptó.

Subteniente Lozano y su hijo el artillero Rafael Lozano en la costa gallega

Subteniente Lozano y su hijo el artillero Rafael Lozano en la costa gallega
¡Gracias hijo! Siempre orgulloso de tu trabajo y comportamiento.

En las profundidades de los acantilados

En las profundidades de los acantilados

Trabajo y buen rollo.

Trabajo y buen rollo.

Acto homanaje a los Caídos

Acto homanaje a los Caídos
Subteniente Lozano, al mando de una Unidad.

Un descanso en la marcha para consultar el plano.

Un descanso en la marcha para consultar el plano.
Academia de Suboficiales, Tremp (Lérida), 1976

Aquellos compañeros de la Academia de Artillería

Aquellos compañeros de la Academia de Artillería

Pieza del 105/26, haciendo fuego sobre "La mujer muerta" (Segovia 1977)

Pieza del 105/26, haciendo fuego sobre "La mujer muerta" (Segovia 1977)
El segundo por la derecha, el alumno de la Academía de Artillería Antonio Lozano.

Aquellos compañeros del RAAA 74

Aquellos compañeros del RAAA 74

Un futuro artillero

Un futuro artillero
Melchor, el hijo de mi viejo amigo de igual nombre, aprendiendo el espíritu artillero de su padre.

Día de las Fuerzas Armadas en Sevilla

Día de las Fuerzas Armadas en Sevilla
Pincha en la foto, y leerás la carta publicada en el Diario ABC, titulada: Sevilla y su Ejército

Gracias a mi tropa

Gracias a mi tropa
Si pinchas en la foto, aparecerá la carta publicada en ABC de Sevilla. ¡Que caro cuesta en ocasiones, decir la verdad!

El subteniente Lozano, el día de su despedida.

El subteniente Lozano, el día de su despedida.
Dos de Mayo del 2006, junto al monumento a Daoiz (Plaza de la Gavidia). Gracias a todos aquellos que tanto me han apoyado, en estos 31 años de servicio.

A mis amigos y compañeros en Kosovo

30 de marzo de 2009
A MIS VIEJOS COMPAÑEROS EN KOSOVO
Hoy muy temprano, antes de que el sol se levantara, me he encontrado con mi amigo Chirlachi. Como cada mañana había sacado su perro a pasear. Cuando lo miro, me siento triste, porque pienso en el cambio que ha dado su vida. Hasta hace poco, a esta hora, ya se encontraba con su Batería, en ropa de gimnasia, a la cabeza de sus artilleros, corriendo por esos campos repletos de naranjos, que rodean El Copero.
Me ha dicho, que esta noche apenas ha dormido, desde que ayer, le llegara un correo desde Kosovo, de uno de sus artilleros más queridos. Se le nota emocionado, y me comenta lo que daría por estar allí, por volver a pasar hambre, frío, pero con la satisfacción de hacer algo util, de ayudar al necesitado, con el orgullo de saber que está junto a sus viejos soldados, trabajando otra vez codo con codo, y realizando una misión importante. Volver a sentir, aquella grata sensación, que sintió en Bosnia hace ya ¡tantos años!.
Me ha dicho, que se ha enterado que mi blog es leído por sus artilleros en Kosovo, y me ha pedido el favor de que desde este, les agradezca a todos, que aún se acuerden de el.
Por eso desde aquí, y en nombre de mi amigo Chirlachi, les envio un fuerte abrazo a todos los componentes del RAAA 74, y demás unidades, desplazados en Kosovo. Les deseo toda la suerte del mundo, para que realicen la misión encomendada, con la profesionalidad que les caracteriza. Vuestro amigo y compañero Chirlachi, sabe que sois los mejores, y vuestros mandos estarán orgullosos de vosotros como el lo está, con la certeza de que dejaréis el nombre de ESPAÑA, en lo más alto.
Un fuerte abrazo de vuestro amigo artillero.

Correo recibido por Chirlachi, y que me ha pedido que redacte en mi blog, como muestra de agradecimiento.

Querido Subteniente, por casualidad he encontrado el blog "Sevilla y la Artillería" en Internet. Me ha hecho recordar viejos y buenos momentos con algunos compañeros, aunque muchos seguimos en el mismo lugar donde usted nos dejo. A día de hoy, gran parte de esa Batería que mandaba en el RAAA 74 ( la 1ª Bía), se encuentra desplegada en Misión de Paz en Kosovo , dado que en el Grupo, siempre ha sido la primera en destacarse en todo lo que hace, como usted inculcó en su día, haciéndolo con orgullo y sacrificio. Con esto, solo quiero que sepa, que siempre tendrá a sus subordinados y amigos, para lo que le haga falta. Como usted decía "la Sección Legionaria" tanto de reclutas como de profesionales, son raíces para forjar buenas personas y militares, de aquellos que ostentamos el lujo de pertenecer a éste arma, como es la Artillería. ¡Me alegra tanto poder contactar con usted!, pues no sabía nada desde aquel fatídico día, del sepelio de nuestro compañero y muy admirado amigo Paco. Espero seguir leyendo en este blog, cosas como las que he podido leer, y enorgullecerme de seguir perteneciendo al mismo arma.
Un cordial saludo y abrazo desde Kosovo: L. M. G. R. (Cabo de la 5ª Bía del GAAAM II/74 ).


- Llevas razón amigo Chirlachi, debe ser dificil conciliar el sueño, después de leer tan entrañable carta.

domingo, 7 de junio de 2009

BASADO EN HECHOS REALES





¿QUIEN SE COMIO EL JAMON, SE BEBIÓ LOS CUBATAS, Y SE FUMÓ EL TABACO?
Corría el año 1983, cuando una Batería del RACA 14 se dispuso para realizar unos Ejercicios de Guerrillas por la sierra gaditana. El enemigo, lo componía una unidad de Operaciones Especiales (Boinas Verdes), cuya misión consistía en intentar apoderarse o volar con explosivos, algunos objetivos de vital importancia para las fuerzas propias, y dicha batería, sería la encargada de su defensa por pelotones.
Cuando llegaron a la zona de acampada, se dispusieron a montar las tiendas, pero el teniente reunió a los sargentos, y les transmitió las órdenes del capitán.
Les hizo entrega de un plano con varios círculos en rojo, una brújula, y una radio AMPRC 77, para mantener el enlace, mientras tanto, el capitán dialogaba con el brigada, a la vez que los artilleros encargados de montar la “Tienda de Mando”, esperaban a que se le indicase el lugar.
Cada sargento tomó su plano, lo orientó con ayuda de la brújula, comprobó el estado de las transmisiones, se colgó la mochila, tomó el subfusil, formó a su pelotón, le pasó revista de armamento a este, les informó de cuál sería su misión, y tomaron el camino.
A uno le tocó la custodia y vigilancia de un caserón abandonado, que simulando un polvorín debía defender. El objetivo de otro, era impedir que el enemigo volase, un enorme Transformador eléctrico que suministraba luz a varios pueblos de la zona, a otro sargento le tocó dar seguridad a una antigua ermita, en mitad de la nada, que simulaba un “Puesto de Mando”. A nuestro protagonista, se le asignó la misión de impedir que un importante puente, que servía de paso para tropas propias, fuese destruido por el enemigo, para evitar quedar aislados sin opción de avanzar.
Después de unas horas de dura marcha, llegaron al dichoso puente. Aquello estaba totalmente abandonado y desierto. El puente era viejo y estrecho, y se encontraba en unas condiciones deplorables, pero con dificultad permitiría el paso de vehículos ligeros, así como la infantería a pie, pero nunca los camiones, BMR, o carros de combate. Por debajo pasaba un arroyuelo, con el agua más sucia, que los pies de algunos artilleros que allí se encontraban.
-Charly, aquí Lima, ¿me recibe? Cambio.
- Adelante Lima, aquí Charly. Cambio.
- Comunico que hemos llegado a la zona X. Cambio.
- ¡Bien!, adopten posición defensiva, y a partir de ya, utilice la radio, solo en el caso de ser atacados, o para contestar a mis llamadas. Cambio.
- Enterado del mensaje. Cambio.
- Lima aquí Charly, cambio y corto.
Esa fue la última vez, que el joven suboficial oyó la voz del capitán. Su mensaje era claro: “silencio en las transmisiones, si no era para una emergencia, o para contestar a su llamada”.
El sargento ordenó pintarse la cara al más puro estilo “Rambo”, llamó a los cabos, se dieron una vuelta por los alrededores, y eligieron el lugar donde colocarían a los centinelas.
No se les dijo, cuánto duraría el ejercicio, por lo que imaginaban que el ataque, podía ser inminente.
Permanecieron alerta las primeras horas, y a las cuatro de la tarde, escucharon el ronroneo del viejo motor de un vehículo acercarse. Convencido de que se trataría del capitán, o en su defecto del teniente, se preparó para dar novedades.
¡Sorpresa! se trataba de un Land Rover con el cabo ranchero, que llegaba con la comida. ¡Bueno comida! Un recipiente, con arroz blanco algo pastoso y pegadillo, y un poco de fruta.
Los artilleros, corrieron hacia su bandeja metálica, que estaba llena de polvo, con lo que tuvieron que lavarla, con el agua que llevaban para su uso en las cantimploras. Le dijeron al ranchero, que a la noche los aprovisionara de agua potable, cuando les llevase la cena. Llegó la tarde, continuaba la vigilancia, y después el ocaso, la oscuridad.
La noche se echó encima, la cara de cansancio ya se reflejaba en algunos artilleros, que no comprendían a que esperaban los guerrilleros para iniciar el ataque.
El sargento a pesar de que la cena no llegaba, cumplió la orden, y no volvió a utilizar la radio. A las dos de la madrugada, apareció el deseado ranchero. Se había perdido y llevaba cuatro horas dando vueltas, con la sopa que se suponía salió caliente del campamento, junto con unas frías croquetas, y un vaso de leche.
El sargento se turno con los cabos, y ordenó que los libres de servicio, se metieran en sus sacos de dormir, para descansar. Era imposible conciliar el sueño. Primero los enormes mosquitos, y más tarde las ratas de agua que correteaban juguetonas por encima de los sacos, impedía que los hombres conciliasen el sueño. Por supuesto con ropa, trinchas, botas, y todo el equipo puesto, excepto las mochilas, que descansaban a su lado.
Amaneció, volvió a anochecer, se agotó el agua, la comida cada vez era más escasa y llegaba fría, pasaron calor, también frío por las noches, incluso uno de los días, les visitó un impresionante aguacero, con rayo y truenos incluidos. ¡En la sierra ya se sabe!. Al principio algunos soldados, se entretenían con las ratas, echándoles trozos de chusco duro. Al cabo de unos días, el pan duro se lo comían ellos. Hubo quien en un momento de desesperación gritó: ¡Estamos aquí en el puente!¡Queréis atacar de una puta vez! El sargento ordenó guardar silencio.
Cuando llegaron era lunes, y comprobó estaban a jueves por la tarde. Los primeros días, el suboficial exigía que cada uno cumpliera con su aseo personal, pero luego comprobó, que era más peligroso lavarse con el agua del riachuelo, que seguir comiditos de mierda.
La comida y el agua seguían llegando con cuentagotas, tarde, y fría. El cansancio hacía mella en la tropa, y hasta en el sargento, aunque la disciplina seguía intacta. A todo esto, la radio sin usar. ¡Una orden, es una orden!
La noche del jueves se montó la seguridad como cada jornada, y los libres de puesto, se dispusieron a descansar, cuando a lo lejos comenzaron a escucharse voces.
Todos saltaron de su saco, tomaron el armamento, y corrieron a ocupar el puesto que con anterioridad, les había asignado el sargento para caso de ataque, y camuflados entre la maleza, comprobaron como un grupo de personas, se acercaba voceando, y hablando de un modo extraño.
Nunca pensaron que el enemigo llegaría cantando, a no ser, que se equivocaran de lugar. El centinela les dio el alto, nadie obedeció, por lo que disparó con munición de fogueo. El disparo se oyó en el silencio del campo.
El que venía en cabeza, gritó ¡tomemos el puente! Sin hacer caso a los tiros que se oían como una ametralladora, y que de ser reales, no quedaría ni uno de los atacantes para contarlo. Pues era impropio de una unidad de élite, ese modo de actuar.
Uno de ellos, con una tiza, escribió en las paredes del puente “BOLADO”, así como se lee. El sargento con un cabreo imponente, estuvo a punto de gritarle: ¡Reclutón, volado es con V!
A todo esto, el cabo que iba al mando de los guerrilleros, pregunta con cierta chulería ¿quien manda aquí?
A lo que el sargento contesta: ¡Aquí mando yo! Y el cabo atacante, con voz casi inentendible, contesta: ¡Pues a partir de ahora, la autoridad soy yo!. ¡¡¡Tiren al sargento al rio!!!
Los guerrilleros hicieron ademán de dirigirse al sargento, en ese momento uno de sus soldados se interpuso para protegerle, lanzándose contra el “invasor”, recibiendo un culatazo de éste, que le rompió el labio. Fue en ese momento, cuando el sargento comprobó como sangraba su artillero, cuando tomó la palanca de su subfusil, la montó y dijo: - ¡Al primero que intente tocar a uno de mis hombres, le vacío el cargador, y mis balas no son de fogueo!.
¡Son muchas las ocasiones, en que recordando aquel día, el sargento se ha preguntado, si lo hubiese hecho!
El rostro desencajado del suboficial, y el sonido del cartucho entrando en la recámara del subfusil, fue suficiente para que por arte de magia, la borrachera colectiva desapareciera, y el alcohol ingerido, milagrosamente dejara de surtir efecto en la sangre de aquellos.
El sargento mirando en la oscuridad, a los ojos del cabo, aseguró: ¡aquí los que mandan, son mis güevos! No era su estilo, pero era consciente de que su prestigio estaba en juego, al igual que la seguridad de sus artilleros.
Solo se escuchó la voz del cabo ordenar a sus hombre ¡A formar mi pelotón!. Iniciando la retirada.
Todos los guerrilleros, corrieron a las inmediaciones del puente, y el más veterano formó a sus hombres.
El sargento abajo con los suyos, intentaba, enlazar con el capitán al otro lado de la radio, para informarle de lo ocurrido. Pero no había forma.
- A la orden mi cabo, forman 18 y conmigo 19.
- Vamos a ver Domínguez si de una puta vez, aprendes a sumar. Dirás 17 y contigo 18.
- No mi cabo, 18 y conmigo 19 aseguró el fornido “boina verde”.
- ¡Cojones!, ¿nos aclaramos o no?, ¿hay en formación alguno que no sea de mi pelotón? Preguntó el cabo.
Silencio sepulcral.
- ¿Hay alguno que no sea guerrillero?
Se levanta una mano temblorosa, y un artillero de pequeña estatura al fondo de la formación, contesta:
- Yo mi cabo, soy artillero.
- Anda, corre con tu sargento, antes de que este nos pegue un tiro.
Y todos, guerrilleros sobre el puente, y artilleros a pie de agua rieron, mientras el novato artillero intentaba abandonar la formación bajo una lluvia de boinazos. Este corrió cuesta abajo, buscando refugio entre los suyos. Bueno, todos rieron, menos el del labio “partió”, que era felicitado por el sargento, por su leal comportamiento.
Cuando el suboficial estableció enlace por radio con el capitán, se le ordenó que tomara el equipo, y que siguiera el rastro de los atacantes, que le fuera informando, y que una sección les cortaría el paso. Así se hizo, y al final ganamos los buenos, ¡el enemigo fue capturado y desarmado!, ¡menos mal, que por entonces, aun no existían los controles de alcoholemia!
Todo esto sin contar por falta de espacio, que en plena oscuridad, se metieron en una zona de toros, y más de uno terminó sobre un árbol. Que algunos miembros del pelotón del famoso puente, durante muchos días, se fueron de bareta, acompañados por una gastroenteritis galopante, debido al agua consumida, con la pérdida de casi ocho kilos de peso.
La misión se había cumplido, el enemigo había sido atrapado. El sargento felicitó a sus hombres, por el hambre, calor, frío, sueño, y un montón de penurias sufridas.
Decir que era costumbre por aquella época, que se comprara jamón, queso, embutidos varios, cervezas, tabaco, y algo de ron o ginebra (en aquellos tiempos, aun no estaba prohibido el consumo moderado de alcohol), para tomarse en la tienda de mandos por estos. Este era consumido en aquellos ratos de descanso y reuniones, y luego una vez terminadas las maniobras, se dividía lo gastado entre el número de oficiales y suboficiales, y se pagaba a partes iguales. Desde el capitán al último sargento. Daba igual que alguno fuera abstemio, o no fumara, o que por su cargo permaneciese todo el día en el campamento, mientras otros no paraban de realizar agotadoras marchas que ocupaban gran parte del día y de la noche, la púa siempre era equitativa.
El sargento del puente, como los demás sargentos desplegados por diferentes puntos, y que la pasaron igual de canutas, comiendo lo que le iba llegando, y bebiendo solo agua y en ocasiones de dudosa potabilidad, recibieron una nota por el brigada administrativo, que decía lo siguiente: “En concepto de gastos de imperio, durante cinco días, le corresponde el pago de 7.500 pesetas, firmado el capitán”. ¡Peros si su sueldo, no superaba las 25.0000 ptas. al mes! El sargento no se lo podía creer, ¡si había estado a pan y agua! sería una broma. Pero no, aquello iba en serio, y abonó la cantidad sin rechistar. Eran otros tiempos, y cualquiera sacaba los pies del tiesto.
En fin, ahora solo es una anécdota, y alguno al leer esto, sonreirá al sentirse aludido, recordando todo, con un hilo de nostalgia, al igual que el sargento, pero con un ligero sabor a jamón, queso viejo, cubata y tabaco rubio americano en la boca. ¡¡¡¡Estás perdonado!!!!!

LA FRASE DEL DIA

"NO TENGO MÁS BALAS QUE MIS PALABRAS PARA DISPARAR, Y NO QUISIERA QUE ME MARCARA LA CINTURA OTRO CINTO, QUE NO FUESE EL QUE ME AJUSTA EL PANTALÓN."

MI AGRADECIMEINTO DE HOY ES PARA "EL CAPITAN ESCARLATA"










Todos los dias, me gusta agradecer a alguien, su fidelidad a este blog.
Demostrando que pesar del paso de años, sigue llevando el amor por la artilleria en su corazón.
No lo he tenido a mis órdenes, pero solo por lo que me cuenta, hubiese sido un honor para mi.
Me refiero al artillero Juan Luis Siquier Fernández, jerezano de pura cepa. Cabo 1º de la 6ª Batería del RAAA 74º, cuando aún estaba en Jerez de la Frontera. Del reemplazo 78-8º, fue uno de los privilegiados artilleros, que llevaron a cabo el relevo de los viejos Boffors de 40/70 por los nuevos Oerlikon bitubo de 35/90, llevándolos desde el Parque de Artillería de Sevilla, hasta Jerez, y tuvo el honor de ser jefe de dos de aquellas piezas, cuando el mando de la batería lo ostentaba el hoy Teniente Coronel D. Rafael Vaca Sánchez del Álamo. Además es hijo de militar y artillero (comandante retirado).
Le gusta la buena cocina, y hasta me ha regalado un librito, para hacer mis primeros pinitos en el arte gastronómico, que le agradezco.
Gracias Juan Juis por tu constante apoyo, y por ser de tu agrado las vivencias de los antiguos artilleros que intento traladar a nuestro blog.
Gracias por la invitación a tu caseta del Circulo de Labradores en tu feria de Jerez, aunque por motivos ajenos a mi voluntad, no pude asistir. Pero te prometo que un día me llego a saludarte.